pereza

Es la tierna palabra
desnudándonos entre tantos ojos.
Contenidos sobre la frente,
para alimentarse
de nosotros y escupirnos.

Los montes sabrán escondernos
en sus barrigas.
Antes que la ciudad me
descubra,
yendome,
sometiéndola a mis dos brazos.

els dies com lluernes

Toma tanto tiempo,
creer que se entiende.
Aveces tantos dias,
que se deja de creer.

des de l' ventre

Hasta el punto de no creer,
e imaginariamente, todos
cayendo sobre las catacumbas.
Devorando lo podrido.
Lamiéndose la piel
para no dejarnos comer
la fruta prometida.

ment

Aveces es como pegarse,
sin mojarse,
a la lluvia fresca.
Ese frió de las mañanas en tus pieles
haciéndose como parte única,
y el deleite de vivir de fondo
en tu cara.

El oír subiéndose por tus pies,
La infinita búsqueda inmovilizada,
en multicolor.

lid.

Somos como bloques,
inimaginados que se muerden encima
de sus otros. Latiendo,
irradiando el calor del oasis voraz
de nuestras carnes.
Arrepentidos de no habérselo tragado
cuando me revolcaban las partes.
Amarrados a la piel.
Anejados del mismo viento
que los hace vivos.

Siempre dormidos entre las luces.
La lid se tiende calmada.

benvida

Puede que me esculpa
las entrañas como culpa.
Pudiese dormirme
y luego volver a nacer.

Es este preciso susurro al oído
que me hipnotiza,
sosegando mi vuelta a los pastizales.